La firma de moda, Charles Vögele, eligió a las hermanas Cruz, Penélope y Mónica, para protagonizar sus campañas publicitarias. Como resultado, las ventas de la marca se derrumbaron. Así, Charles Vögele decidió anular la campaña con las hermanas Cruz.
La publicidad provocó a la marca de moda una pérdida de más de cincuenta millones de euros en seis meses. Como consecuencia, André Maeder, director ejecutivo de la firma que contrató a las hermanas, fue despedido de su cargo. Todo indicaría que Charles Vögele rompe su relación comercial con Penélope y Mónica Cruz, a menos de un año de su contrato. Sin embargo, ellas desmintieron las informaciones que sugieren que han arruinado a la marca de ropa suiza; y aseguran que siguen colaborando con la firma. "La firma continúa con la misma campaña protagonizada por nuestras representadas y en noviembre lanzarán la nueva colección diseñada por ellas", ha informado a través de un comunicado la empresa Kuranda, representante de las actrices.
Las mujeres suizas habrían confesado no sentirse identificadas con las hermanas y, por ello, habrían dejado de comprar en las tiendas de Charles Vögele.
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